Esos viejos prejuicios
Existen muchos estereotipos alrededor de cómo es un matemático o -en general- cualquier persona a la que le gustan las matemáticas: ñoños y mataditos, personas que cargan la calculadora y plumas en el bolsillo de la camisa, gente que puede hacer operaciones aritméticas muy grandes a la velocidad de la luz, introvertidos e incapaces de desempeñarse en sociedad; básicamente un personaje de The Big Bang Theory y ni siquiera de los populares. También, por el otro lado, hay quienes insisten en que un matemático puede hacer lo que quiera: puede estudiar ingeniería y construir puentes, estudiar física e ir al espacio, estudiar computación y hacerte millonario inventando alguna app con cerditos y pájaros suicidas.
Existen muchos estereotipos alrededor de cómo es un matemático o -en general- cualquier persona a la que le gustan las matemáticas: ñoños y mataditos, personas que cargan la calculadora y plumas en el bolsillo de la camisa, gente que puede hacer operaciones aritméticas muy grandes a la velocidad de la luz, introvertidos e incapaces de desempeñarse en sociedad; básicamente un personaje de The Big Bang Theory y ni siquiera de los populares. También, por el otro lado, hay quienes insisten en que un matemático puede hacer lo que quiera: puede estudiar ingeniería y construir puentes, estudiar física e ir al espacio, estudiar computación y hacerte millonario inventando alguna app con cerditos y pájaros suicidas.
En realidad, a toda clase de personas les gustan las matemáticas. Por ejemplo: ¿sabías que Michael Jordan estudió Matemáticas en su primer año de Universidad? Eventualmente se cambió de carrera, pero siempre ha tenido un gusto particular. También Jonny Buckland, el guitarrista de Coldplay, estudió Matemáticas en University College London, donde conoció a sus compañeros de banda -todos universitarios también.
Hoy te vamos a platicar de tres casos que puedes o no conocer sobre matemáticos -o más en general, gente a la que le gustan las matemáticas- que quizás no sospeches, que se desempeñan profesionalmente en áreas que no vienen en el perfil de egreso.
Mayim Bialik, Natalie Portman y el número de Erdös-Bacon
El matemático húngaro Paul Erdös fue exageradamente prolífico en su vida académica con más de 1,500 artículos y colaboraciones. exactamente, tuvo 511 colaboradores directos distintos. A alguien se le ocurrió darle a Erdös el número 0, a cada uno de sus colaboradores el número 1, a cada persona que colaboró con alguno de sus colaboradores el número 2, etcétera. Así, el número de Erdös ayuda a medir la "distancia colaborativa" que tiene una persona a Erdös.
Análogamente, en el cine se decidió crear el número de Bacon, como la distancia colaborativa a Kevin Bacon, ese actor estadounidense que quizás te suene a método científico pero en realidad has visto en todas partes, pues el propio Bacon bromeó que había trabajado con todo mundo en Hollywood o, si no, todos habían trabajado con alguien que hubiera trabajado con él.
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| para referencias, Kevin Bacon |
Sumando los números de Erdös y de Bacon de una persona dada, se obtiene su número de Erdös-Bacon, que está pensado para encontrar maravillosas conexiones entre personas. Es más o menos común que científicos famosos -sobre todo divulgadores como Carl Sagan, Stephen Hawking o Noam Chomsky tengan números bajos pues hay una alta probabilidad de que tengan un número de Erdös bajo y su número de Bacon es bajo vía documentales y series de televisión. Sin embargo, también personas de la farándula tienen números sorprendentemente bajos; en particular, hay dos actrices muy famosas que tienen un número de Erdös-Bacon extraordinariamente bajo: Mayim Bialik y Natalie Portman ambas tienen un número Erdös-Bacon de 7, ambas como 5+2.
Seguro reconoces a Mayim Bialik como Amy en The Big Bang Theory (o Blossom, si naciste en los 80s); además de tener un Emmy por ser la novia de Sheldon, Mayim tiene doctorado en neurociencias y varias publicaciones en el área. Puedes leer la que le lleva al número Erdös de 5 siguiendo esta liga. además, tiene un número de Erdös-Bacon-Sabbath ridículamente bajo.
Natalie Portman, nacida Natalie Hershlag, estudió psicología en Harvard y publicó un artículo que puedes comprar acá, una colaboración en un estudio sobre la memoria. Además de un número de Erdös-Bacon de 7, Portman tiene un Oscar que no es nada despreciable -aunque apareció en las prequelas de Star Wars, que más o menos le quitan puntos.
Se dice -de broma- que el extraordinario beisbolista Hank Aaron tiene número de Erdös de 1, pues ambos autografiaron la misma pelota de béisbol como obsequio para Carl Pomerance. Puedes leer la maravillosa historia acá.
Por último, Danica McKellar, Winnie Cooper en Los Años Maravillosos tiene un número Erdös-Bacon de 6, como 4+2. Además, de entre los cuatro que aquí mencionamos, es la única que lo logró por publicar un artículo de matemáticas, cuando estudiaba la licenciatura en UCLA. No solo eso, puedes leer su paper publicado en esta liga. De hecho, recientemente ha publicado una serie de libros titulados Math doesn't suck, junto con algunos videos de divulgación, además de pequeñas apariciones en series famosas.
John Urschel, los Cuervos de Baltimore y las matemáticas
Esta es la biografía de John Urschel en Twitter:
Baltimore Raven. Mathematician. Penn State Adjunct Research Assistant. Professional Mathlete
Leíste bien: dice Professional Mathlete. John Urschel es un guardia ofensivo de los Cuervos de Baltimore en su segunda temporada para la NFL; es decir, un hombre grande de 1.90m de estatura y 140kg de peso. Este es John Urschel:
Como la mayoría de los deportistas profesionales estadounidenses, es un universitario. En su caso -que no el de todos- se esperó a terminar la carrera antes de saltar a la liga profesional y es un universitario graduado de la Universidad de Pennsylvania (Penn State), donde obtuvo licenciatura y maestría en matemáticas. Este también es John Urschel:
que no es tu profesor universitario promedio. pero, para ser justos, tampoco es tu jugador de americano promedio. Urschel tiene varios artículos publicados en matemáticas: en su página de Google Academic, el futbolista cuenta seis publicaciones en total. Además, escribe una pequeña columna para The Players Tribune donde combina fútbol y estadísticas.
Urschel fue particularmente relevante el año pasado con su más reciente colaboración publicada. En el equipo se la toman con humor; el Coach le ha prohibido hacer matemáticas muy avanzadas cuando se ha pegado la cabeza particularmente fuerte:
Cool it on the math problems, @MathMeetsFball. http://t.co/ZWZ7eCyG7L
— Baltimore Ravens (@Ravens) agosto 18, 2015
En esta entrevista para el Huffington Post, Urschel platica por qué le gustan tanto las matemáticas, y por qué cree que a los estudiantes en general no; una pista: porque las estamos enseñando mal.
Niels y Harald Bohr, futblistas
En 1889, un grupo de académicos de la Universidad de Copenhague fundaron un equipo de fútbol, el equipo de la Real Academia Danesa de Ciencas y Letras, el AB o Akademisk Boldklub. En sus inicios, una de las condiciones para poder jugar en él era ser estudiante universitario. Aunque actualmente juega en Segunda División -que es la tercera-, en sus primeros años, el equipo dominó la liga danesa, ganando el campeonato en total 9 veces entre 1919 y 1967.
Harald Bohr, un joven de apenas 16 años de edad, se unió al equipo en 1903 y su hermano menor Niels entró en 1905. Habían jugado fútbol juntos desde la secundaria y, para evitar competencia, Harald era delantero mientras que Niels era portero. Además, Harald decidió estudiar matemáticas mientras Niels prefirió la física.
Niels estuvo en el equipo apenas una temporada. Una anécdota cuenta que, a mitad de un partido que su equipo tenía dominado, Niels estuvo a nada de recibir un gol porque estaba distraído tratando de resolver un problema de matemáticas en uno de los postes. Se dedicó de lleno a sus estudios y sin duda valió la pena pues terminó siendo uno de los físicos más relevantes del siglo XX, quizás solo detrás de Albert Einsten, y recibió un Premio Nobel en 1922 -apenas 17 años después de haber dejado el fútbol, por lo que podrías estar a tiempo.
Sin embargo, Harald se mantuvo en el equipo. era tan bueno que fue convocado para el equipo que participó en los Juegos Olímpicos de 1908 en Londres. En el debut olímpico, Harald le anotó dos veces a los franceses en la victoria danesa de 9 a 0. En la semi-final, Dinamarca le metió una goleada histórica a Francia -quien participó con dos equipos- de 17 a 1, que hasta ahora sigue siendo el marcador más abultado en la historia de Juegos Olímpicos. Sin embargo, Dinamarca perdió la final contra los anfitriones por 2 a 0.
El último juego de Harald con el equipo fue una revancha contra Inglaterra que Dinamarca terminó ganando por 2 a 1 en 1910. Se dice que era tan querido como futbolista que en su disertación doctoral asistieron más hinchas que académicos.
Harald Bohr terminó fundando la rama de análisis matemático de funciones casi periódicas, trabajando su tesis sobre problemas de series de Dirichlet. Puedes leer más sobre la familia Bohr y el fútbol acá, quizás te interese saber que Niels no es el único Nobel de la familia; puedes leer más en particular sobre Niels en este artículo de Letras Libres.
¿Quién más conoces?
Como puedes ver, la pasión por las matemáticas no están realmente peleadas con ninguna otra pasión y pueden combinarse bastante bien con una disciplina artística como la actuación, o con un deporte llevado seriamente al profesionalismo.
¿Conoces más matemáticos insospechados? Déjanos tu recomendación en los comentarios.
Harald Bohr, un joven de apenas 16 años de edad, se unió al equipo en 1903 y su hermano menor Niels entró en 1905. Habían jugado fútbol juntos desde la secundaria y, para evitar competencia, Harald era delantero mientras que Niels era portero. Además, Harald decidió estudiar matemáticas mientras Niels prefirió la física.
Niels estuvo en el equipo apenas una temporada. Una anécdota cuenta que, a mitad de un partido que su equipo tenía dominado, Niels estuvo a nada de recibir un gol porque estaba distraído tratando de resolver un problema de matemáticas en uno de los postes. Se dedicó de lleno a sus estudios y sin duda valió la pena pues terminó siendo uno de los físicos más relevantes del siglo XX, quizás solo detrás de Albert Einsten, y recibió un Premio Nobel en 1922 -apenas 17 años después de haber dejado el fútbol, por lo que podrías estar a tiempo.
Sin embargo, Harald se mantuvo en el equipo. era tan bueno que fue convocado para el equipo que participó en los Juegos Olímpicos de 1908 en Londres. En el debut olímpico, Harald le anotó dos veces a los franceses en la victoria danesa de 9 a 0. En la semi-final, Dinamarca le metió una goleada histórica a Francia -quien participó con dos equipos- de 17 a 1, que hasta ahora sigue siendo el marcador más abultado en la historia de Juegos Olímpicos. Sin embargo, Dinamarca perdió la final contra los anfitriones por 2 a 0.
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| uno de estos apuestos caballeros es Harald |
Harald Bohr terminó fundando la rama de análisis matemático de funciones casi periódicas, trabajando su tesis sobre problemas de series de Dirichlet. Puedes leer más sobre la familia Bohr y el fútbol acá, quizás te interese saber que Niels no es el único Nobel de la familia; puedes leer más en particular sobre Niels en este artículo de Letras Libres.
¿Quién más conoces?
Como puedes ver, la pasión por las matemáticas no están realmente peleadas con ninguna otra pasión y pueden combinarse bastante bien con una disciplina artística como la actuación, o con un deporte llevado seriamente al profesionalismo.
¿Conoces más matemáticos insospechados? Déjanos tu recomendación en los comentarios.
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